En el Buenos Aires Lawn Tennis Club, el azuleño Federico Delbonis batió al italiano Fabio Fognini por 6-7 6-4 y 6-4 y, de esta manera, está entre los dieciséis mejores del ATP de Buenos Aires. Mañana, a primera hora, será rival del español Nicolás Almagro. Desde Buenos Aires, Santiago Ángel.

En el Buenos Aires Lawn Tennis Club, el azuleño Federico Delbonis batió al italiano Fabio Fognini por 6-7 6-4 y 6-4 y, de esta manera, está entre los dieciséis mejores del ATP de Buenos Aires. Mañana, a primera hora, será rival del español Nicolás Almagro.

Fortaleza mental. Esa fue la única diferencia significativa entre ambos jugadores. En definitiva, ese punto a favor del pupilo de Gustavo Tavernini jugó un rol clave en el resultado final del encuentro. Para el argentino, la principal clave estuvo en mantenerse enfocado a pesar de la adversidad. No darse por vencido fue una frase primordial que utilizó para salir victorioso de la flamante cancha central Guillermo Vilas. Para Fognini, lo de hoy fue más de lo mismo, es decir, más de lo que nos ha mostrado año a año, partido a partido: tenis de élite, personalidad irascible. Este combo le trajo serios problemas al crédito de San Remo, ya sea dentro de la pista -perdiendo un sinfín de partidos que, en un principio, estaban bajo control- o fuera de ella -precisamente con la ATP y la imposición de varias multas por conductas antideportivas-.

En la parte numérica, Delbonis construyó su triunfo a partir de la efectividad obtenida con su primer y segundo servicio: 70% y 54%, respectivamente. Fognini, por su parte, el balance le dio negativo en comparación de lo hecho por su adversario: 62% y 50%. El otro rubro determinante fue el de cantidad de roturas: cinco para Delbonis contra tres de Fognini.

Para Delbo, actual Nº45 del ranking ATP, no habrá tiempo para descansar ni celebrar este gran éxito ante el máximo exponente de Italia. Este miércoles, desde las 14, estará frente a frente con Nicolás Almagro, vencedor de su compatriota Albert Montañés. Será el cuarto cruce entre ambos. La serie entre sí favorece al oriundo de Murcia (2-1). La última vez que se han enfrentado oficialmente fue en febrero de 2014, durante el ATP 250 de San Pablo, Brasil. Allí, por los octavos de final, quien será local en el día de hoy triunfó por 3-6 6-3 y 6-2.

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Fortaleza mental. Esa fue la única diferencia significativa entre ambos jugadores. En definitiva, ese punto a favor del pupilo de Gustavo Tavernini jugó un rol clave en el resultado final del encuentro. Para el argentino, la principal clave estuvo en mantenerse enfocado a pesar de la adversidad. No darse por vencido fue una frase primordial que utilizó para salir victorioso de la flamante cancha central Guillermo Vilas. Para Fognini, lo de hoy fue más de lo mismo, es decir, más de lo que nos ha mostrado año a año, partido a partido: tenis de élite, personalidad irascible. Este combo le trajo serios problemas al crédito de San Remo, ya sea dentro de la pista -perdiendo un sinfín de partidos que, en un principio, estaban bajo control- o fuera de ella -precisamente con la ATP y la imposición de varias multas por conductas antideportivas-.

En la parte numérica, Delbonis construyó su triunfo a partir de la efectividad obtenida con su primer y segundo servicio: 70% y 54%, respectivamente. Fognini, por su parte, el balance le dio negativo en comparación de lo hecho por su adversario: 62% y 50%. El otro rubro determinante fue el de cantidad de roturas: cinco para Delbonis contra tres de Fognini.

Para Delbo, actual Nº45 del ranking ATP, no habrá tiempo para descansar ni celebrar este gran éxito ante el máximo exponente de Italia. Este miércoles, desde las 14, estará frente a frente con Nicolás Almagro, vencedor de su compatriota Albert Montañés. Será el cuarto cruce entre ambos. La serie entre sí favorece al oriundo de Murcia (2-1). La última vez que se han enfrentado oficialmente fue en febrero de 2014, durante el ATP 250 de San Pablo, Brasil. Allí, por los octavos de final, quien será local en el día de hoy triunfó por 3-6 6-3 y 6-2.