El joven canadiense habló de toda la nueva experiencia que se está viviendo en Flushing Meadows con la burbuja que se implementó para evitar los contagios de COVID-19 y felicitó a la organización. Por Javier Ayala.

La mayoría de los protagonistas que se encuentra en la burbuja que se montó en Nueva York confirma que se están haciendo las cosas de manera correcta, y también es el caso del canadiense Felix Aliassime, que comentó como es toda la experiencia y dio palabas de apoyo a la Federación de los Estados Unidos, “Todo lo que puedo decir es: ¡felicitaciones a la USTA! Han creado un entorno muy seguro aquí en Flushing Meadows para nosotros, los jugadores. Estuve en Francia, en Mónaco, y aquí es casi más seguro. Por supuesto, la pregunta más importante era sobre el viaje, la llegada al aeropuerto. Pero incluso en el aeropuerto no había nadie. Aquí, en Flushing Meadows, todo se limpia y desinfecta todo el tiempo. Todo el mundo usa máscaras. Los trabajadores, en el gimnasio o en el restaurante, todos usan máscara y guantes. Supongo que tienes más riesgos de contratar el Covid-19 yendo a un restaurante en Francia, al menos en algunos restaurantes, que aquí. Así que, de verdad, felicidades a la organización aquí en Nueva York”.

“Como cabeza de serie, también tengo la posibilidad de que el palco del Ashe Stadium se vuelva a vestir en los vestuarios. No es para todos los jugadores, desafortunadamente, pero es bueno. Todo mi equipo está conmigo en la caja. Disponemos de sofás para descansar, una mesa para los masajes y, por último pero no menos importante, una gran vista de la pista para ver a los demás jugadores mientras hacen sus entrenamientos. El único estrés proviene de lo desconocido. Nunca se sabe realmente si contrajo el virus o no”, explicó las ventajas de los que son cabeza de serie en el cuadro principal.

El canadiense confesó que no tiene miedo, sino la incertidumbre de no saber cuándo se contagia una persona, “Realmente no tengo miedo por mí, mi salud. Pero también debo pensar en mi equipo. Les pido que vengan conmigo aquí en Nueva York, viajen desde Europa en un período turbulento, incluso si todo el mundo lo hace de buena gana. Entonces, cuando todos nos ponen a prueba, por supuesto, tienes un poco de estrés esperando el veredicto. Me hicieron la prueba el sábado, como dije, y luego el lunes por la mañana. Recibimos correos electrónicos que nos dicen cuándo seremos evaluados. Supongo que será cada dos o tres días. Realmente nunca tuve una duda sobre mi presencia aquí, en Nueva York. Mi mayor pregunta era “¿no es extraño hablar del calendario de tenis y los torneos cuando suceden tantas cosas en el mundo con el coronavirus?” Pero este es nuestro mundo, nuestro trabajo, así que lo entiendo y acepto. Pero aun así, es un poco extraño centrarse en el tenis en ese contexto”.

El tema de jugar sin público, tanto Cincinnati como el US Open es algo extraño, algo que destaca Félix, “Los primeros días no fue tan extraño ver un estadio vacío. Estamos antes del torneo, así que es hora de entrenar, siempre frente a asientos vacíos, como siempre. Pero cuando comience el torneo, será lo mismo: sin multitud. Y luego, realmente creo que podría sonar extraño. Eso es lo más molesto, jugar sin la afición. Por supuesto, jugar el Masters 1000 de Cincinnati en Flushing Meadows es inusual. Cuando llegas a Nueva York, es para jugar el US Open, ¡no Cincinnati! Entonces, algunas veces tuve que decirme a mí mismo: “Hola Félix, recuerda, tienes que jugar ‘Cincy’ antes del US Open”, y agregó que espera que puedan poner algo de ambiente en el estadio, “Pero aun así, no me parece tan extraño como jugar un Grand Slam frente a… nadie. Realmente es una locura. ¿Impactará el juego en sí? Es difícil decirlo ahora. Puede ser de alguna manera. Pero creo que el hecho de que juguemos el torneo de Cincinnati antes que Estados Unidos nos dará algo de experiencia. Pero sigue siendo difícil imaginar cómo reaccionaremos cuando tengamos que jugar un partido de Grand Slam en un estadio Arthur-Ashe vacío. Supongo que todos lo averiguaremos. Espero que pongan algo de sonido ambiental, como hicieron en UTS. Podría ser bueno para nosotros”.